6.3.14

El Agua Celestial


“Los médicos de la antigüedad llamaron a la menstruación Tian Gui o Agua Celestial, porque creían que la sangre menstrual era diferente a la que circulaba por las venas y nutre los cuerpos. Sabían que el hombre tenía que eyacular en la vagina para que la mujer se quedara embarazada, y que cuando ésta concebía, la menstruación se interrumpía. Puesto que no podían ver el óvulo con los ojos, identificaron la esencia reproductiva de la madre con la sangre menstrual, que equivalía a la esperma del hombre.

El ginecólogo chino del siglo XVII Fu Quing Zhu escribió: “la sangre menstrual no es sangre sino agua celestial que se origina en los riñones, es roja como la sangre pero no es sangre, por eso se llama agua celestial. (…) Celestial indica el descenso del verdadero chi del Cielo, Gui indica agua como las nubes del cielo que generan agua.”

En los riñones almacenamos nuestro chi (energía vital) y nuestro jing (esencia prenatal), por lo tanto son los responsables de nuestro crecimiento y desarrollo. La sangre menstrual no es solo una descarga mensual de materia de desecho del útero. Es la esencia, la energía vital que necesitamos para vivir.

El principal componente de la menstruación en la sangre. Según los antiguos médicos, la sangre menstrual empieza a fluir por primera vez cuando, a los 14 años, confluyen una serie de factores. Nuestra energía de los riñones debe ser fuerte y debemos haber acumulado suficiente sangre como para que pueda eliminarse por el útero. Además, el chi y la sangre deben estar equilibrados y fluir armoniosamente por los órganos. Y los dos meridianos responsables de gobernar los ciclos femeninos de siete años deben funcionar correctamente.

El meridiano de Vaso Concepción debe fluir con fuerza y el meridiano Central debe tener suficiente sangre. Cuando estas variables se unen, comienza la menstruación.

El comienzo del Agua Celestial es un hito en los ciclos femeninos. Es el comienzo de la fase reproductiva y es un momento clave en lo que a la salud femenina se refiere. Puesto que el comienzo de la menstruación supone una transición radical, es un periodo muy vulnerable y hay que tener cuidados y atenciones especiales.”


Del libro “Medicina Tradicional China para la Mujer” de Xiaolan Zhao
(ISBN 9788479537517, Ed. Urano).
Imagen: “Cellular Shift” de Arla Patch.