20.12.13
17.12.13
Sanar significa dejar atrás las heridas
"Deja de mirar atrás." |
"No podemos crearnos un mundo nuevo mientras el sistema
adictivo viva dentro de nosotras. Si no nos fijamos en cómo colaboramos
diariamente con el sistema que nos está destruyendo, estamos en peligro de
actuar según la modalidad de la víctima perpetua, siempre culpando a los demás
de nuestros problemas. Más o menos como la mujer maltratada que finalmente se
marcha porque un día comprende que si se queda se va a morir, cada una de
nosotras debe reconocer cuándo y dónde estamos colaborando con nuestra propia
opresión.
A muchas mujeres nos han hecho perder el conocimiento las
contradictorias exigencias de nuestra cultura. Y muchas de nosotras estamos
despertando del desmayo. Casi siempre se estimula la sanación de trastornos
como el dolor pelviano, el síndrome premenstrual y el síndrome de la fatiga
crónica, causados por cuidar de demasiadas personas, cuando comprendemos que no
estamos solas en nuestro sufrimiento y que nuestros problemas se dan en un
contexto cultural que no suele apoyarnos. Recuperar la salud y aprender a
crearnos una buena salud cotidianamente supone llamar a nuestras experiencias
por su nombre, por doloroso que sea, y luego comprender que el motor de nuestra
vida se encuentra dentro de nosotras, independientemente de nuestro pasado.
Si bien es extraordinariamente útil tener un médico o
profesional de la salud que reconozca la conexión mente-cuerpo, es aún más
importante que comprendamos que nuestro cuerpo y sus síntomas forman parte de
nuestra guía interior. Podemos liberarnos de nuestra excesiva dependencia del
sistema médico viendo de qué maneras nuestras creencias y nuestro
comportamiento perpetúan las partes de este sistema que no nos ayudan a crear
salud. Si continuamos pensando que nuestras enfermedades y nuestros síntomas,
como la endometriosis, los miofibromas y el síndrome premenstrual, son problemas
«simplemente médicos» y no están relacionados con otras partes de nuestra vida,
participamos en el sistema adictivo de la asistencia médica y de ese modo lo
perpetuamos.
Por otra parte, cuando aprendemos a sintonizar con el
lenguaje de nuestro cuerpo, somos más capa-ces de tomar decisiones informadas
respecto a los exámenes médicos y las técnicas de la medicina, lo cual puede
llevar a relaciones más satisfactorias con las personas que nos atienden en
materia de salud. Hemos de comenzar a confiar en nosotras mismas y en nuestras
experiencias tanto como confiamos en los informes de laboratorio.”
Extracto del libro “Cuerpo
de mujer, Sabiduría de mujer” de Christiane Northrup.
9.12.13
Intuiciones y semillas
Del libro “Mensaje
urgente a las mujeres” de Shean Shinoda Bolen.
“La percepción directa intuitiva ocurre de muchas maneras,
incluida la de una voz interior que llega sonora y clara a fin de hacerte saber
cuándo una misión te corresponde.
Tal vez sea tu corazón el que decida. Puede que descubras
que eres incapaz de alejarte de alguien que necesita algo que tú quieres
brindar, o de algo que quieres hacer. En ninguno de los casos sabes siquiera si
eres capaz de ello. Cuando es el corazón el que te guía, esa misión lleva tu
nombre escrito.
Como un embarazo inesperado, es posible que albergues las
semillas de algo que cambiará tu vida y el mundo. Toma la semilla y deposítala
dentro de un círculo de mujeres, nútrela con sabiduría, infúndele vigor; poda
lo que sea necesario podar y deja que la raíz principal ahonde hasta llegar al campo de energía de la Madre Tierra, para que
se alimente de él y contribuya con pensamiento y acción al campo morfogenético,
y luego sácala al mundo para que florezca y dé fruto.
Todas y cada una de las cosas que existen en la naturaleza
pertenecen a su grupo particular, con el que comparten semejanzas, al tiempo
que cada una es en sí misma única; en ningún caso hay dos ejemplares idénticos.
Sin embargo, cada una de ellas florece o fructifica junto con las demás, cuando
llega su temporada. Algunas especies pueden permanecer en letargo durante
largos períodos esperando simplemente a
que las condiciones sean las propicias; y entonces, esas semillas que no están
directamente conectadas unas con otras, empiezan todas a un tiempo a lanzar
zarcillos a la superficie. El que no está atento, cuando por fin florecen,
tiene la sensación de que han aparecido de la noche a la mañana.
Creo que esto es análogo a lo que sucede en estos momentos.
La atención está puesta allá donde está la acción: en las guerras y conflictos,
en los centros de poder, en los escándalos y celebridades.
Inadvertido y, no obstante, a ras de tierra, un mensaje
empieza a aflorar en nuestras conciencias. Crece con más fuerza en unos lugares
que en otros; pero, unidas por un hilo invisible, como la comunicación en
Internet, o como la bilocación observada por la física en la que dos partículas
relacionadas, y separadas por grandes distancias, se mueven juntas, o como fuentes
que se nutren de la misma capa acuífera, las mujeres han empezado a comprender
el mensaje: reúne a las mujeres, salva
el mundo.”
Entrevista a Jean Shinoda Bolen
Con el feminismo la
mujer salió al mundo, ahora ¿cuál es nuestro desafío?
El mayor desafío es transformarnos en nuevas personas. Las
mujeres tienen la oportunidad de integrar el funcionamiento intelectual y su
capacidad de acción en el mundo con los roles más tradicionales a nivel de
relación. Pero siempre desde la libertad de elección y siendo auténticas y
leales consigo mismas.
Por eso, ahora el desafío es que la mujer lleve adelante los
valores y capacidades que ha desarrollado para hacer de su familia, su
comunidad y el mundo un lugar mejor.
¿Qué papel tienen las
tradiciones?, ¿cómo se logra la integración de los distintos roles?
Lo más importante es qué elegimos hacer con nuestros
talentos en nuestras vidas. Creo que las tradiciones mantienen a las mujeres
limitadas a roles particulares y a ciertas actitudes, pero ahora tenemos una
opción que nunca tuvimos antes: podemos convertirnos en mujeres con una familia
si lo deseamos y al mismo tiempo hacer una diferencia con nuestra vida, ya sea
a través de las relaciones humanas y afectivas o en el mundo externo. Esta es
una posibilidad que tenemos por primera vez y tenemos que aprovechar.
¿Qué características
de las mujeres se necesitan hoy?
Descubrimos que las mujeres reaccionamos de manera diferente
en tiempos de estrés y crisis. Es por eso que las mujeres somos tan necesarias
ahora, en las más altas esferas del poder donde se toman las decisiones más
importantes: sobre la paz o la guerra, la manera de gastar los presupuestos de
cada nación y toda clase de temas relacionados con el cuidado del planeta y el
medio ambiente. Se necesita que las mujeres participemos con nuestros valores y
cualidades para resolver los conflictos.
¿Se necesita que
tengamos un rol más activo?
A las mujeres no suele atraerles la idea de la guerra, sin
embargo, hay muy pocas mujeres involucradas en detener las guerras. Por eso, la
diferencia se logra con la combinación de dos factores: un mayor número de
mujeres en puestos de poder y la presencia de algunos hombres que tiene
presente su lado femenino, como el actual presidente de Estados Unidos Barack
Obama, quien desea trabajar con otros en lugar de estar a cargo de todo.
Entonces hay que
despertar la energía femenina también en los hombres.
Cuando los hombres son criados y educados por mujeres, ellos
aprenden a valorar más los sentimientos y la empatía. Entonces tienen la chance
de desarrollar los dos lados de su cerebro, tanto el izquierdo como el derecho,
sus talentos mentales y emocionales. En cambio, esos no suelen ser los valores
que los hombres promueven en sus hijos varones. Si se da una relación
igualitaria entre los padres, si el hombre es criado por una mujer o si existe
la fuerte influencia de una pareja u otra mujer importante en su vida, es sólo
entonces que el hombre también puede aprender, a partir de la experiencia, cómo
expresarse y escuchar, cómo hacer su parte.
Agosto 2009 - Texto completo en Mujer Despierta.
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